Las galletas de mantequilla son un clásico gastronómico que han conquistado paladares de todas las edades alrededor del mundo. Con su irresistible aroma a mantequilla y su textura que se deshace en la boca, estas deliciosas galletas se han ganado un lugar especial en la tradición culinaria de numerosos países.
Galletas de mantequilla
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Fácil
25
2
4
49 Kcal
Energía
11%
2.28 g
Grasas
69 g
Hidratos
0.98 g
Proteínas
Las galletas de mantequilla, también conocidas como «shortbread» en la tradición anglosajona, son sinónimo de simplicidad culinaria y aquí te explicaremos cómo hacerlas de forma fácil y rápida.
Recetas recomendadas
Ingredientes para hacer Galletas de mantequilla
Los ingredientes son el corazón de toda receta, y cuando se trata de las galletas de mantequilla, cada componente desempeña un papel esencial en la creación de su sabor y textura. Toma nota de los sencillos ingredientes que deberás de tener a la mano al momento de prepararlas.
- 275 gramos de harina de trigo
- 275 gramos de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
- 75 gramos de azúcar glass
Pasos a seguir para la elaboración de las galletas de mantequilla
La preparación de las galletas de mantequilla es un proceso sencillo, pero minucioso, que no lleva más de 1 hora. A continuación, te desglosamos paso a paso cómo hacer esta receta clásica para que puedas disfrutar de estas galletas hechas por tus propias manos:
- Vierte los 275 gramos de mantequilla sin sal a temperatura ambiente en un recipiente amplio en donde puedas usar la batidora.
- Con la ayuda de una batidora, bate la mantequilla durante un par de minutos hasta lograr que quede cremosa, tal y como se muestra en la foto.
- Agrega los 75 gramos de azúcar glass y bate a velocidad alta por entre 15 y 20 minutos si hace frío en donde vives. En caso de que haga calor, puedes batir por alrededor de 10 minutos.
- Agrega la mitad de la harina de trigo y con la ayuda de alguna espátula o cuchara, mezcla con movimientos envolventes de forma lenta y suave.
- Agrega el resto de la harina y mezcla de nuevo, hasta lograr que la masa tenga una consistencia como la del betún o el frosting, solo que un poco más pesada. Simultáneamente, precalienta el horno a 180| C o a 350° F.
- Llena tu manga pastelera con la masa elaborada en el paso anterior, pero no uses una bolsa de plástico, debido a que podría explotar en tu cara. De manera simultánea, prepara una bandeja con papel encerado o engrásala con mantequilla.
- Haz la forma de las galletas en la bandeja dejando un espacio entre ellas, pues recuerda que se expandirán cuando se estén cocinando. Con esta cantidad de masa y dependiendo del tamaño de las galletas, te deberían de salir aproximadamente 40 galletas de mantequilla.
- En caso de que no tengas una duya, puedes usar una cuchara pequeña, tomar un poco de la mezcla y dejarla sobre la bandeja. Luego, enharina la cuchara y con la pancita de esta, aplasta la masa para que se forme un disco o círculo. No te preocupes si los círculos no lucen estéticos.
- Finalmente, lleva las galletas al horno y deja que se cocinen a 180° C o 350° F por 15 minutos o hasta que notes que comienzan a tornarse de un color dorado. Luego, solo tendrás que esperar a que se enfríen y podrás degustarlas.
Consejos y recomendaciones para unas galletas de mantequilla perfectas
Como habrás notado, es muy fácil hacer las galletas de mantequilla, pero, si deseas que queden perfectas, con una textura suave y un sabor increíble, aquí te dejamos algunas recomendaciones a tener en cuenta:
- Asegúrate de que la mantequilla esté a temperatura ambiente, lo que facilita su mezcla con otros ingredientes y contribuye a la textura adecuada de las galletas.
- Evita batir la masa en exceso, ya que esto puede desarrollar demasiado gluten en la harina y hacer que las galletas sean más duras. Mezcla solo hasta que los ingredientes se combinen.
- Si gustas, después de mezclar la masa, refrigérala durante al menos 30 minutos. Esto ayudará a que las galletas mantengan su forma mientras se hornean y evita que se extiendan demasiado en el horno.
- Presta atención al tiempo de horneado, pues las galletas de mantequilla deben estar doradas en los bordes, pero todavía suaves en el centro y el tiempo puede variar según tu horno, así que mantén un ojo en ellas.
- Deja que las galletas se enfríen en la bandeja durante unos minutos antes de transferirlas a una rejilla para enfriar completamente. Esto les dará la oportunidad de endurecerse un poco.
- Guarda las galletas en un recipiente hermético a temperatura ambiente para mantener su frescura. También puedes congelarlas si quieres conservarlas por más tiempo.
- ¡No temas experimentar! Puedes añadir trozos de chocolate, nueces o extractos de sabor para personalizar tus galletas de mantequilla y crear variedades únicas.
Si quieres conocer otra receta perfecta para un postre fácil y rápido con el que puedas sorprender a tu familia, aquí te dejamos nuestra receta de Creps con chocolate.